Cronos en el Neveral,
Nos encontramos en el Tercer Aniversario de Nuestro Club Cronos Jaén, y como quiera que de alguna forma queríamos celebrarlo, se propuso el pasar un agradable día en el Neveral. La idea, que apetecía a muchos, fue alegremente acogida por todos, que sin reparo alguno aceptamos tan gentil propuesta
Con las Prisas y las tardanzas de siempre (con mi mujer no llegaré puntual ni a mi entierro), subimos al Neveral, ciertamente cuando llegué ya estaban casi tod@s, con las ausencias ya cantadas de algunos compañeros, y la presencia más que agradable de otros.
Y así fue, después de hacer el allanamiento del terreno propio de la ocasión, dispusimos en un banco de cemento nuestro fortín de cerveza y comida, y, es entonces cuando algún compañero se apresura a improvisar nuestra primera cerveza que animosamente la mayoría agradece.
Como siempre, la nota que nos faltaba la puso aquel “Agradable Señor” (No quiero llamarle otra cosa) que con la amabilidad característica y propia de un indígena al que asaltan su cueva (y no quiero con ello menospreciar a los indígenas) que nos hizo desmontar la tienda. Si hay que quitar la tienda, la quitamos, pero un curso de Buenos Modales, Civismo y Adiestramiento Animal se le resolverían muchos de los problemas que ese pobre hombre seguro tenía. (Por eso pienso también que los perros siempre deberían que llevar el bozal puesto, con todos mis respetos para los perros)
Ya centrados en lo nuestro, y dejando de lado explicaciones sobre la “Fauna Ibérica” poco a poco se van incorporando los miembros que faltaban, y empezamos a comer lo que había, de entre las muchas cosas incorporadas improvisadamente en la Mesa-Fortín(Tortilla, Tortilla y algo de tortilla) así que espero que la próxima vez alguien tenga un poco de más originalidad y por lo menos si hay que comer tortilla, alguna mujer (que dicen hacer la comida y piensan más que nosotros, aunque todas pensaron lo mismo) le pongan a la tortilla pimiento, queso, jamón o mortadela.
Por supuesto, La pasta no podía faltar, algo de embutido y muchas otras cosas propias de los momentos de campo. Pero, aún siendo la tortilla la reina de nuestra comida comimos y charlamos, nos turnábamos entre unos y otros, parecía, un me toca con Juanra, me toca con Jose Antonio, me toca con Nono… y así con tod@s, de forma que ha sido un auténtico gustazo el poder conversar, intercambiar palabras con los compañeros uno tras otro y, ciertamente, me pareció una oportunidad única, excelente, maravillosa e insuperable para poder hablar con los compañeros del Club sin las prisas de, termino la carrera y me tengo que ir…
A los que fueron, podría darles las gracias, podría decirles alguna que otra cosa con connotaciones más que agradables, pero tampoco hace falta, ellos saben que su presencia es la esencia de la existencia de un Club que crece al amparo de ellos mismos.
A los que no fueron, aparte de que se perdieron una oportunidad única, solamente decirles que les esperamos en la próxima, no dentro de un año, sino cuando sencillamente quedemos…
Como quiera que no deseo en esta ocasión extenderme mucho, (Que luego Nono me tilda de Novelista), no quisiera despedirme sin deciros que, para el próximo Domingo hemos pensado un entrenamiento de Subida al Quiebrajano, en principio desde el Km. 8 +- asi que, Ánimo y os esperamos a tod@s
La verdad es que sí que echamos un ratillo muy agradable. Se pasó el tiempo volando (como siempre que estás agusto).
ResponderEliminarUna cosa ¿dónde estaban las tortillas de patatas?.
La que hizo mi mujer sobró entera y cuando bajábamos me dijo, "pues eah, ya tenemos la comida de mañana". Así que ya sabes lo que como hoy: Tortilla con 10 huevos.
Menos mal que en el sorteo benéfico que hicimos me tocó la tripa salchichón.
Ya he visto que has atinado con lo de la publi, yo acabo de contribuir.
Un abrazo,
Nono.